Autorretrato de humo Mérida
Performance de cámara
La Sede, La Rendija,
24 de Febrero de 2015,
Mérida, Yuc.
40 min
Imágenes Fausto Luna
Autorretrato de Humo
Parábola III
“No es la primera vez que hago un autorretrato de humo. He recurrido a él como una
forma simbólica en acción para desprenderme de lo irremediable y abrir un futuro
después de la muerte de seres queridos. Es un proceso del dolor que pasa, es luto in
fluxus y un proceso de humanización y reflexión subjetiva.
Sin embargo, hay situaciones dolorosas que se vuelven una suerte de maldición,
difíciles de atravesar; entre ellas, una de las más atroces es la muerte perpetrada y la
falta de justicia. ¿Qué hacer con ello?”
El arte del performance recurre a su fugaz soporte: el tiempo y espacio físicos y a
su poética de signos, símbolos y metáforas mutantes. La experiencia busca
desafiar los significados sin aludir a contenidos específicos.
En este performance, Elvira Santamaría desarrolla una narrativa surreal sobre
las vida y la muerte. A través de objetos, elementos y gestos muy sencillos ,
Santamaría va en busca de una imagen: construcción física y psíquica como
ilusión concreta, acabada, pero “en realidad”, delegada a procesos de valores
culturales; a la deconstrucción y reconstrucción de la memoria; quizás a la
historia, pero, finalmente, a la entropía.
Se trata de una propuesta apolítica pero ética en su libre empatía.
Esta pieza forma parte del proyecto Parábolas de desalojo y procesos de
regeneración, el cual es un recorrido por la memoria colectiva de México y otras
sociedades actuales cuya historia más reciente se ha visto marcada por la violencia, la
falta de justicia y periodos postraumáticos caracterizados por la falta de conciencia,
atención y procesos de recuperación. A través de acciones en contextos públicos,
performance-instalación (procesos) y performance de cámara, Elvira Santamaría
busca crear una serie de obras-vivenciales que formen, en su conjunto, un corpus
narrativo del deseo, la voluntad y la responsabilidad humana de intentar siempre
sanar, superar y desafiar los estragos del dolor perpetrado, no sólo por el abuso de
poder, sino también por el conjunto de condiciones económicas, políticas y sociales
desfavorables que lo acompañan.